En el mundo empresarial, especialmente para las mujeres que aspiramos a puestos de alta dirección, hay una verdad incuestionable: ninguna llega sola a la cima. Detrás de cada historia de éxito, suele haber mentoras que guiaron, aconsejaron y abrieron puertas. La mentoría no es un lujo, es una herramienta estratégica para acelerar nuestro crecimiento profesional.
Dónde Buscar Mentoras en Tu Industria
El primer paso es identificar a mujeres cuyo camino admiras y cuya experiencia resuene con tus metas. Algunos lugares para comenzar:
- Redes profesionales: Plataformas como LinkedIn
- Asociaciones y eventos de mujeres líderes
- Alma máter: Redes de exalumnas
- Dentro de tu propia organización
Recuerda: Una buena mentora no te dará todas las respuestas, pero te ayudará a hacer las preguntas correctas.
Qué Preguntas Hacer en una Sesión de Mentoría
Prepara preguntas que te den insights prácticos y estratégicos:
- “¿Cuál fue tu mayor desafío al llegar a dirección?”
- “¿Qué habilidades son indispensables en mi posición?”
- “¿Cómo manejaste el sesgo de género?”
- “¿Qué errores te enseñaron más?”
No temas pedir contactos, recomendaciones o feedback sobre tu plan de carrera. Una mentora comprometida compartirá no solo conocimiento, sino su red.
Cómo Retribuir el Conocimiento
Cuando tengas experiencia:
- Conviértete en mentora formal
- Comparte tus aprendizajes (charlas, artículos)
- Abre puertas a otras mujeres
- Crea una comunidad de apoyo
Conclusión
En un mundo con barreras invisibles, la mentoría es un acto revolucionario. Te acorta la curva de aprendizaje y te recuerda que lo que aspiras ya es posible.
El verdadero éxito no se mide por lo alto que llegues, sino por cuántas llevaste contigo.
En IDEM, creemos que el liderazgo se construye en comunidad. ¿Lista para encontrar a tu mentora… o para convertirte en una?
— Una empresaria que sigue aprendiendo y enseñando